Medidas de protección y control frente al (COVID-19)
La salud del pie y tobillo es fundamental para la movilidad y la calidad de vida. Sin embargo, muchas veces no prestamos suficiente atención a nuestra postura y a cómo afecta a estas estructuras cruciales. Una evaluación postural adecuada puede ser la clave para identificar y corregir desequilibrios y problemas biomecánicos que podrían conducir a lesiones. En este artículo, analizaremos cómo una evaluación postural puede prevenir lesiones en el pie y tobillo, y proporcionaremos consejos sobre cómo realizar estas evaluaciones y qué intervenciones pueden ser útiles.
¿Qué es una Evaluación Postural?
Una evaluación postural es un análisis detallado de la alineación y el equilibrio del cuerpo en posición estática y en movimiento. Este tipo de evaluación permite identificar cualquier desalineación o desequilibrio que pueda afectar la función de los pies y tobillos. Los profesionales de la salud, como fisioterapeutas y podólogos, utilizan diversas herramientas y técnicas para realizar estas evaluaciones, incluyendo observación visual, análisis de la marcha y el uso de tecnologías avanzadas como escáneres y plataformas de presión.
Beneficios de la Evaluación Postural
Cómo Realizar una Evaluación Postural
Intervenciones Útiles para Corregir Desequilibrios Posturales
La evaluación postural es una herramienta poderosa para prevenir lesiones en el pie y tobillo. Al identificar y corregir desequilibrios y problemas biomecánicos, podemos reducir el riesgo de lesiones, mejorar el rendimiento y mantener una buena salud podológica. Si tienes preocupaciones sobre tu postura o experimentas dolor en los pies o tobillos, consulta al Dr. Andrés Delgado, especialista en pie y tobillo, para una evaluación postural completa y un plan de tratamiento personalizado. Mantener una postura adecuada es fundamental para disfrutar de una vida activa y sin dolor.
El COVID-19 se propaga rápidamente de persona a persona, principalmente por las siguientes vías:
Lávese las manos con frecuencia con agua y jabón por al menos 20 segundos, especialmente después de haber estado en un lugar público, o después de sonarse la nariz, toser o estornudar.
Es de suma importancia que se lave:
Si no dispone de agua y jabón, use un desinfectante de manos que contenga al menos un 60 % de alcohol. Cubra toda la superficie de las manos y frótelas hasta que las sienta secas.
Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca sin haberse lavado las manos.
Dentro de su casa: evite tener contacto con personas que están enfermas. De ser posible, mantenga una distancia de 2 metros entre la persona enferma y otros miembros de su hogar.
Fuera de su casa: mantenga una distancia de 6 pies de las personas que no viven en su casa.
Las mascarillas ayudan a prevenir que contraiga o propague el virus.
Podría transmitir el COVID-19 a otras personas incluso si no se siente mal.
Todos deben usar una mascarilla en lugares públicos y cuando están con otras personas que no viven en su hogar, especialmente cuando es difícil mantener otras medidas de distanciamiento social.
NO use una mascarilla destinada a trabajadores de atención médica. Actualmente, las mascarillas quirúrgicas y las mascarillas de respiración N95 son suministros fundamentales que deberían reservarse para los trabajadores de la salud y el personal de respuesta a emergencias.
Siga manteniendo una distancia de aproximadamente 6 pies de las demás personas. El uso de la mascarilla no reemplaza el distanciamiento social.
Cúbrase siempre la boca y la nariz con un pañuelo desechable al toser o estornudar o cúbrase con la parte interna del codo y no escupa.
Eche los pañuelos desechables usados a la basura.
Lávese las manos inmediatamente con agua y jabón por al menos 20 segundos. Si no dispone de agua y jabón, límpiese las manos con un desinfectante de manos que contenga al menos un 60 % de alcohol.
Limpie y desinfecte diariamente las superficies que se tocan con frecuencia . Esto incluye las mesas, las manijas de las puertas, los interruptores de luz, los mesones, las barandas, los escritorios, los teléfonos, los teclados, los inodoros, los grifos, los lavamanos y los lavaplatos.
Si las superficies están sucias, límpielas. Lávelas con agua y detergente o jabón antes de desinfectarlas.
Luego, use un desinfectante de uso doméstico. La mayoría de los desinfectantes comunes para el hogar funcionarán.
Esté atento a los síntomas. Esté atento a la aparición de fiebre, tos, dificultad para respirar u otros síntomas del COVID-19.
Controle su temperatura si presenta síntomas.