Medidas de protección y control frente al (COVID-19)
Ante la artrosis de rodilla y de cadera, es bien sabido que el reemplazo articular mediante una prótesis es el tratamiento. Pero cuando se habla de la misma enfermedad en la articulación del tobillo, ésta opción no se les ofrece en general a los pacientes.
La artrosis de una articulación, consiste en el deterioro del cartílago de la misma, produciendo dolor, limitación de la movilidad de dicha articulación, inflamación persistente y gran limitación de la función de la misma. En el caso de las articulaciones de carga, como lo son el tobillo, la rodilla y la cadera, esto se traduce en limitación importante de la capacidad de caminar, mermando la calidad de vida de los pacientes e influyendo en su salud, debido al sedentarismo que ello conlleva.
Este deterioro del cartílago de las articulaciones, puede ser debido a una enfermedad primaria de la articulación, que se ve con frecuencia en la rodilla y la cadera, mucho menos frecuente en el tobillo; también puede ser debido a una enfermedad sistémica, como la artritis reumatoide y otras enfermedades reumáticas; de la misma manera puede deberse a una alteración de la alineación o estabilidad de la articulación afecta, en este caso el tobillo, como resultado de un traumatismo previo que pudo haber necesitado una cirugía en el pasado. Hay otras causas como la infección de una articulación que puede también dar pie a un daño articular suficiente que pueda evolucionar a una artrosis de tobillo.
Hoy en día existen cada vez más técnicas e indicaciones para prolongar la vida de un tobillo con enfermedad degenerativa, mediante cirugía de preservación articular, en la que se intenta dar estabilidad y alineación al tobillo para que pueda funcionar de la mejor manera posible y pare el deterioro del cartílago, dando alivio temparalmente o defilnitivamente a los pacientes tratados.
A pesar de los esfuerzos para prevenir o tratar la enfermedad degenerativa del tobillo, todavía existen pacientes que desarrollan un deterioro tal del tobillo que necesitan tratamientos en los que no es posible conservar su articulación. En el caso de la rodilla y la cadera, estos pacientes se les ofrece un reemplazo articular mediante una prótesis, pero en el caso del tobillo, muchas veces ni siquiera se les ofrece la posibilidad de plantearse un reemplazo articular y se les indica de forma indiscutible una fusión de la articulación (artrodesis) que resulta en bloqueo total de la movilidad del tobillo.
La prótesis de tobillo es una opción, actualmente válida y con cada vez mas respaldo científico, para el tratamiento de la artrosis de tobillo y el Dr Andrés Delgado es un especialista formado y con experiencia en el tratamiento de ésta patología, ofreciéndoles la oportunidad a sus pacientes para poder conseguir un tratamiento mas funcional de la artrosis de tobillo, permitiendo a sus pacientes mantener la movilidad de su articulación, que les permite caminar de una forma mas natural, mejorando su calidad de vida.
El COVID-19 se propaga rápidamente de persona a persona, principalmente por las siguientes vías:
Lávese las manos con frecuencia con agua y jabón por al menos 20 segundos, especialmente después de haber estado en un lugar público, o después de sonarse la nariz, toser o estornudar.
Es de suma importancia que se lave:
Si no dispone de agua y jabón, use un desinfectante de manos que contenga al menos un 60 % de alcohol. Cubra toda la superficie de las manos y frótelas hasta que las sienta secas.
Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca sin haberse lavado las manos.
Dentro de su casa: evite tener contacto con personas que están enfermas. De ser posible, mantenga una distancia de 2 metros entre la persona enferma y otros miembros de su hogar.
Fuera de su casa: mantenga una distancia de 6 pies de las personas que no viven en su casa.
Las mascarillas ayudan a prevenir que contraiga o propague el virus.
Podría transmitir el COVID-19 a otras personas incluso si no se siente mal.
Todos deben usar una mascarilla en lugares públicos y cuando están con otras personas que no viven en su hogar, especialmente cuando es difícil mantener otras medidas de distanciamiento social.
NO use una mascarilla destinada a trabajadores de atención médica. Actualmente, las mascarillas quirúrgicas y las mascarillas de respiración N95 son suministros fundamentales que deberían reservarse para los trabajadores de la salud y el personal de respuesta a emergencias.
Siga manteniendo una distancia de aproximadamente 6 pies de las demás personas. El uso de la mascarilla no reemplaza el distanciamiento social.
Cúbrase siempre la boca y la nariz con un pañuelo desechable al toser o estornudar o cúbrase con la parte interna del codo y no escupa.
Eche los pañuelos desechables usados a la basura.
Lávese las manos inmediatamente con agua y jabón por al menos 20 segundos. Si no dispone de agua y jabón, límpiese las manos con un desinfectante de manos que contenga al menos un 60 % de alcohol.
Limpie y desinfecte diariamente las superficies que se tocan con frecuencia . Esto incluye las mesas, las manijas de las puertas, los interruptores de luz, los mesones, las barandas, los escritorios, los teléfonos, los teclados, los inodoros, los grifos, los lavamanos y los lavaplatos.
Si las superficies están sucias, límpielas. Lávelas con agua y detergente o jabón antes de desinfectarlas.
Luego, use un desinfectante de uso doméstico. La mayoría de los desinfectantes comunes para el hogar funcionarán.
Esté atento a los síntomas. Esté atento a la aparición de fiebre, tos, dificultad para respirar u otros síntomas del COVID-19.
Controle su temperatura si presenta síntomas.