Medidas de protección y control frente al (COVID-19)
Los deportes acuáticos son una excelente manera de disfrutar del agua y mantenerse en forma, pero también conllevan el riesgo de sufrir diversas lesiones. Es importante conocer las lesiones comunes asociadas con estos deportes y tomar medidas preventivas para evitarlas. En este artículo, abordaremos algunas lesiones frecuentes en deportes acuáticos y brindaremos consejos sobre cómo prevenirlas. Además, exploraremos ejercicios específicos que ayudarán a mejorar tu técnica y rendimiento, al tiempo que reducirán el riesgo de lesiones.
Esguinces, distensiones de ligamentos y fracturas de Lisfranc en el pie y tobillo
Uno de los escenarios más comunes para este tipo de lesiones es cuando los practicantes de Kitesurf son arrojados de la tabla, y su pie queda atrapado en el anclaje y la correa. Esta situación puede provocar una fractura en la articulación de Lisfranc o Tarsometatarsiana. Para prevenir este tipo de lesiones, es fundamental utilizar un equipo adecuado y asegurarse de que las conexiones y anclajes estén correctamente ajustados. Además, es esencial recibir un entrenamiento adecuado para aprender técnicas de caída segura y liberación rápida del equipo en caso de emergencia.
Contusiones óseas y heridas
Las contusiones óseas y las heridas son lesiones que pueden ocurrir en deportes acuáticos debido a varios factores, como la inexperiencia, las condiciones climáticas, la presencia de otros practicantes o incluso el fondo marino. Es fundamental mantener la atención constante en uno mismo y en los demás. Mantener la distancia adecuada entre los practicantes y conocer las reglas de seguridad del deporte en el que estás participando ayudará a evitar colisiones y situaciones peligrosas. Además, utilizar el equipo de protección adecuado, como cascos y chalecos salvavidas, también es crucial para prevenir lesiones graves.
Condropatía rotuliana
La condropatía rotuliana es un desgaste del cartílago de la rótula y puede ser el resultado de impactos fuertes en la rodilla o de una musculatura del cuádriceps débil. Para prevenir esta lesión, es importante fortalecer los músculos del cuádriceps a través de ejercicios específicos, como sentadillas y estiramientos de la zona. Además, utilizar rodilleras de apoyo durante la práctica de deportes acuáticos puede ayudar a reducir la tensión en la articulación de la rodilla y proteger el cartílago.
Meniscopatía
La meniscopatía, o pinzamiento del menisco en la rodilla, es una lesión que puede ocurrir debido a la flexión continua de la rodilla durante la práctica de deportes acuáticos. Para prevenir esta lesión, es esencial mantener una musculatura equilibrada y bien desarrollada alrededor de la rodilla. Realizar ejercicios de fortalecimiento de los músculos cuádriceps, isquiotibiales y pantorrillas ayudará a distribuir adecuadamente las cargas y reducir la tensión
En conclusión, para disfrutar al máximo de los deportes acuáticos y evitar lesiones, es fundamental tomar medidas preventivas y mantener una buena condición física. El uso de equipo de protección adecuado, recibir entrenamiento adecuado, mantener la atención constante en uno mismo y en los demás, y fortalecer los músculos relevantes son aspectos clave para prevenir lesiones comunes en estos deportes. Además, realizar ejercicios de propiocepción, abdominales hipopresivos y estiramientos ayudará a mejorar la estabilidad, la fuerza y la flexibilidad, lo que contribuirá a una mejor técnica y un menor riesgo de lesiones. Recuerda que la seguridad siempre debe ser la prioridad al practicar deportes acuáticos, y seguir las recomendaciones de profesionales de la salud y entrenadores capacitados puede marcar la diferencia en tu experiencia acuática.
El COVID-19 se propaga rápidamente de persona a persona, principalmente por las siguientes vías:
Lávese las manos con frecuencia con agua y jabón por al menos 20 segundos, especialmente después de haber estado en un lugar público, o después de sonarse la nariz, toser o estornudar.
Es de suma importancia que se lave:
Si no dispone de agua y jabón, use un desinfectante de manos que contenga al menos un 60 % de alcohol. Cubra toda la superficie de las manos y frótelas hasta que las sienta secas.
Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca sin haberse lavado las manos.
Dentro de su casa: evite tener contacto con personas que están enfermas. De ser posible, mantenga una distancia de 2 metros entre la persona enferma y otros miembros de su hogar.
Fuera de su casa: mantenga una distancia de 6 pies de las personas que no viven en su casa.
Las mascarillas ayudan a prevenir que contraiga o propague el virus.
Podría transmitir el COVID-19 a otras personas incluso si no se siente mal.
Todos deben usar una mascarilla en lugares públicos y cuando están con otras personas que no viven en su hogar, especialmente cuando es difícil mantener otras medidas de distanciamiento social.
NO use una mascarilla destinada a trabajadores de atención médica. Actualmente, las mascarillas quirúrgicas y las mascarillas de respiración N95 son suministros fundamentales que deberían reservarse para los trabajadores de la salud y el personal de respuesta a emergencias.
Siga manteniendo una distancia de aproximadamente 6 pies de las demás personas. El uso de la mascarilla no reemplaza el distanciamiento social.
Cúbrase siempre la boca y la nariz con un pañuelo desechable al toser o estornudar o cúbrase con la parte interna del codo y no escupa.
Eche los pañuelos desechables usados a la basura.
Lávese las manos inmediatamente con agua y jabón por al menos 20 segundos. Si no dispone de agua y jabón, límpiese las manos con un desinfectante de manos que contenga al menos un 60 % de alcohol.
Limpie y desinfecte diariamente las superficies que se tocan con frecuencia . Esto incluye las mesas, las manijas de las puertas, los interruptores de luz, los mesones, las barandas, los escritorios, los teléfonos, los teclados, los inodoros, los grifos, los lavamanos y los lavaplatos.
Si las superficies están sucias, límpielas. Lávelas con agua y detergente o jabón antes de desinfectarlas.
Luego, use un desinfectante de uso doméstico. La mayoría de los desinfectantes comunes para el hogar funcionarán.
Esté atento a los síntomas. Esté atento a la aparición de fiebre, tos, dificultad para respirar u otros síntomas del COVID-19.
Controle su temperatura si presenta síntomas.