Medidas de protección y control frente al (COVID-19)
El pasado viernes 3 de noviembre, tuve el honor y el placer de participar en las Jornadas sobre Dolor del Hospital Intermutual Euskadi, un evento de gran relevancia en el ámbito de la medicina y la salud. Estas jornadas, dirigidas por la Dra. Noelia Calvo y llevadas a cabo en la prestigiosa Universidad de Deusto, representaron una excelente oportunidad para compartir conocimientos y experiencias con un destacado grupo de especialistas. Durante el evento, se abordaron cuestiones fundamentales relacionadas con el tratamiento del dolor en nuestros pacientes, en un entorno multidisciplinario que promovió la búsqueda de las mejores soluciones.
En estas jornadas, se llevaron a cabo debates y discusiones profundas sobre diversos temas cruciales, entre los que se incluyen:
El Reto de la Patología Articular en el Tobillo
En este contexto enriquecedor, tuve la oportunidad de compartir mi experiencia y conocimiento en el área de "Patología articular a nivel del tobillo: un reto para la unidad de dolor". Desde el Servicio de Traumatología en HIE, exploré los desafíos y las estrategias que enfrentamos al tratar a pacientes con problemas articulares en el tobillo. Este tema es de suma importancia, ya que las afecciones articulares pueden ser debilitantes y requieren un enfoque especializado.
Las Jornadas sobre Dolor del Hospital Intermutual Euskadi fueron un testimonio de la importancia de la colaboración multidisciplinaria en la búsqueda de soluciones efectivas para el tratamiento del dolor. La diversidad de temas discutidos y la participación de destacados especialistas enriquecieron nuestras perspectivas y nos equiparon con conocimientos actualizados.
Agradezco a la Dra. Noelia Calvo, a la Universidad de Deusto y a todos los participantes por hacer posible este evento significativo. Estoy ansioso por seguir explorando nuevas vías para mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes y abordar los desafíos en el tratamiento del dolor en el futuro.
El COVID-19 se propaga rápidamente de persona a persona, principalmente por las siguientes vías:
Lávese las manos con frecuencia con agua y jabón por al menos 20 segundos, especialmente después de haber estado en un lugar público, o después de sonarse la nariz, toser o estornudar.
Es de suma importancia que se lave:
Si no dispone de agua y jabón, use un desinfectante de manos que contenga al menos un 60 % de alcohol. Cubra toda la superficie de las manos y frótelas hasta que las sienta secas.
Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca sin haberse lavado las manos.
Dentro de su casa: evite tener contacto con personas que están enfermas. De ser posible, mantenga una distancia de 2 metros entre la persona enferma y otros miembros de su hogar.
Fuera de su casa: mantenga una distancia de 6 pies de las personas que no viven en su casa.
Las mascarillas ayudan a prevenir que contraiga o propague el virus.
Podría transmitir el COVID-19 a otras personas incluso si no se siente mal.
Todos deben usar una mascarilla en lugares públicos y cuando están con otras personas que no viven en su hogar, especialmente cuando es difícil mantener otras medidas de distanciamiento social.
NO use una mascarilla destinada a trabajadores de atención médica. Actualmente, las mascarillas quirúrgicas y las mascarillas de respiración N95 son suministros fundamentales que deberían reservarse para los trabajadores de la salud y el personal de respuesta a emergencias.
Siga manteniendo una distancia de aproximadamente 6 pies de las demás personas. El uso de la mascarilla no reemplaza el distanciamiento social.
Cúbrase siempre la boca y la nariz con un pañuelo desechable al toser o estornudar o cúbrase con la parte interna del codo y no escupa.
Eche los pañuelos desechables usados a la basura.
Lávese las manos inmediatamente con agua y jabón por al menos 20 segundos. Si no dispone de agua y jabón, límpiese las manos con un desinfectante de manos que contenga al menos un 60 % de alcohol.
Limpie y desinfecte diariamente las superficies que se tocan con frecuencia . Esto incluye las mesas, las manijas de las puertas, los interruptores de luz, los mesones, las barandas, los escritorios, los teléfonos, los teclados, los inodoros, los grifos, los lavamanos y los lavaplatos.
Si las superficies están sucias, límpielas. Lávelas con agua y detergente o jabón antes de desinfectarlas.
Luego, use un desinfectante de uso doméstico. La mayoría de los desinfectantes comunes para el hogar funcionarán.
Esté atento a los síntomas. Esté atento a la aparición de fiebre, tos, dificultad para respirar u otros síntomas del COVID-19.
Controle su temperatura si presenta síntomas.